jueves, 26 de agosto de 2021

471. Qué tiempos aquellos

En los tiempos que corren el campo visual se estrecha, el presente está lleno de dudas y el futuro es una incógnita por despejar. Así las cosas, es fácil caer en la tentación de mirar con morriña al pasado. Hace poco cayó en mis manos un relato que iba un poco de eso, el cual, resumido y parafraseado, venía a decir más o menos que, qué tiempos aquellos en que se fumaba en la cama (el pitillo de después), en que los sueños no se interrumpían ni con cien despertadores y las noches románticas duraban veinticuatro horas y (como diría Sabina) tropecientos días. Pero, ojito con estos nostálgicos tocamientos mentales, pues como dijo en cierta ocasión un amigo sabio de un amigo igual de sabio: las lágrimas que se vierten por el pasado suelen empañar la mirada al futuro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario